La nueva legislación marroquí, que entró en vigor el 1 de febrero será de obligatorio cumplimiento el próximo 20 de junio de 2020, tras un período transitario.
El proceso de verificación de la conformidad afectará a una amplia gama de productos como electrodomésticos, electrónica, sustancias químicas, plásticos, materiales de construcción, juguetes, aparatos de gas y petróleo y componentes de automoción, que necesitarán un certificado de conformidad para entrar en el mercado marroquí que asegure que son auténticos.
El 80% de los productos se verificarán en origen y el resto en Marruecos. Tres compañías certificadoras están homologadas y han homogeneizado las listas para las familias de productos a exportar, también será necesario que el etiquetado se haga en francés o árabe para casi todos los productos, pero es recomendable que los exportadores consulten caso por caso.
Las compañías verificadoras se encargará de realizar una revisión documental, una inspección física, los ensayos de laboratorio y la emisión del certificado o la validación de certificado en destino.
Se han establecido tres rutas:
- Ruta A: está pensada para cualquier tipo de empresa y producto. “Tras pasar la inspección física, se emite un certificado electrónico”,
- Ruta B: estará a disposición de aquellos productos que ya están registrados por la certificadora dentro de una misma categoría. “Cada vez que haya un nuevo envío, se facilitará el documento necesario sin necesidad de hacer una revisión documental previa”.
- Ruta C: destinada a aquellos fabricantes y/o distribuidores que ya han obtenido la autorización y está orientada a exportadores habituales.